Se veia venir. Tanta mayoría absoluta. Tanta encuesta favorable. Pero la realidad es más simple, y con sólo echar un vistazo a las preguntas que se hacian en esas encuestas se podía adivinar cual era el futuro político de nuestra comunidad autónoma. Por dar un dato, en una de esas encuestas se preguntaba a los encuestados que a quién iban a votar, y que quién creían que iba a ganar las elecciones; la mayoría decian ser votantes del PSOE pero creían que el PP sería el ganador de las elecciones. De esta manera, y con este dato tan simple, se podía pensar que el electorado socialista pensaba que aunque votasen a su PSOE sería el PP quien gobernaría; sin embargo el resultado de las elecciones ha sido claro, el PP gana con mayoría simple, pero gobernará el PSOE con el apoyo condicional (muy condicional) de IU.
Tal vez la euforia de los populares ante las encuestas que le daban mayoría absoluta ha sido contraproducente. Tal vez no acudir al debate en Canal Sur ha sido una decisión errónea. Tal vez algún día el Partido Popular deberá comprender por qué es el único partido de este país que necesita de una mayoría absoluta para poder gobernar. Ahora queda la reflexión para saber entender lo que ha pasado.
Sí, el PP ha ganado las elecciones en Andalucía, pero no va a gobernar, y a eso se le llama perder. Sí, el PSOE ha perdido las elecciones en Andalucía, pero va a gobernar, y a eso se le llama ganar. Pero quién ha ganado verdaderamente estas elecciones ha sido IU, que ha recibido inesperadamente los votos socialistas cabreados y ha duplicado sus representantes en el parlamento andaluz, eso sí es ganar.
Analicemos ahora los datos. El PP ha ganado, vale, pero ha ganado habiéndole votado 162.947 personas MENOS que en 2008, es decir, que le han votado menos personas pero ha conseguido mejor resultado. El por qué es muy simple, es porque al PSOE le han votado 654.831 personas menos, de ellas han votado 119.883 a IU, y el resto han optado por no votar o votar a otras opciones minoritarias. Al final algo más de 650.000 personas de las que votaron en 2008 han decidido no votar en esta ocasión, fundamentalmente votantes del PSOE y del PP, porque ambos han perdido votos en comparación con las elecciones de 2008.
En definitiva, el PP pierde votantes, el PSOE pierde muchos votantes, e IU se aprovecha de ello, ese sería el titular.
Pero ahora veamos los resultados en Castilleja. El PSOE gana de nuevo unas elecciones, pero perdiendo una parte importante de su electorado. El PP pierde esta vez por 801 votos de diferencia con el PSOE abriendo la brecha que empezó con las municipales del pasado año, continuó con las generales de noviembre, y que dan el espaldarazo definitivo en estas autonómicas. Los populares siguen perdiendo apoyo, hasta el punto de haber empeorado los resultados de 2008. IU se recupera y gana unos cientos de votos. UPyD sigue en alza y el PA en caída libre.
En definitiva, a veces ganar unas elecciones resulta un trago amargo, y para otros sin embargo perderlas es un triunfo inesperado. Así es la política amigos, el mundo al revés.
Tal vez la euforia de los populares ante las encuestas que le daban mayoría absoluta ha sido contraproducente. Tal vez no acudir al debate en Canal Sur ha sido una decisión errónea. Tal vez algún día el Partido Popular deberá comprender por qué es el único partido de este país que necesita de una mayoría absoluta para poder gobernar. Ahora queda la reflexión para saber entender lo que ha pasado.
Sí, el PP ha ganado las elecciones en Andalucía, pero no va a gobernar, y a eso se le llama perder. Sí, el PSOE ha perdido las elecciones en Andalucía, pero va a gobernar, y a eso se le llama ganar. Pero quién ha ganado verdaderamente estas elecciones ha sido IU, que ha recibido inesperadamente los votos socialistas cabreados y ha duplicado sus representantes en el parlamento andaluz, eso sí es ganar.
Analicemos ahora los datos. El PP ha ganado, vale, pero ha ganado habiéndole votado 162.947 personas MENOS que en 2008, es decir, que le han votado menos personas pero ha conseguido mejor resultado. El por qué es muy simple, es porque al PSOE le han votado 654.831 personas menos, de ellas han votado 119.883 a IU, y el resto han optado por no votar o votar a otras opciones minoritarias. Al final algo más de 650.000 personas de las que votaron en 2008 han decidido no votar en esta ocasión, fundamentalmente votantes del PSOE y del PP, porque ambos han perdido votos en comparación con las elecciones de 2008.
En definitiva, el PP pierde votantes, el PSOE pierde muchos votantes, e IU se aprovecha de ello, ese sería el titular.
Pero ahora veamos los resultados en Castilleja. El PSOE gana de nuevo unas elecciones, pero perdiendo una parte importante de su electorado. El PP pierde esta vez por 801 votos de diferencia con el PSOE abriendo la brecha que empezó con las municipales del pasado año, continuó con las generales de noviembre, y que dan el espaldarazo definitivo en estas autonómicas. Los populares siguen perdiendo apoyo, hasta el punto de haber empeorado los resultados de 2008. IU se recupera y gana unos cientos de votos. UPyD sigue en alza y el PA en caída libre.
En definitiva, a veces ganar unas elecciones resulta un trago amargo, y para otros sin embargo perderlas es un triunfo inesperado. Así es la política amigos, el mundo al revés.
